Los alumnos de 3.º de la E.S.O., de religión, del IES Senara, visitan Toledo y el Parque Temático Puy du Fou 

AUTOR: LUIS MARTÍN FIGUERO (Profesor de Religión del IES senara)

Los días dos y tres de mayo, alumnos de 3.º E.S.O. del IES. Senara de Babilafuente, matriculados en la asignatura de Religión, junto con los alumnos del I.E.S. Fray Luis de León de Salamanca y el I.E.S. Torrente Ballester de Santa Marta, ciento cuarenta en total, disfrutaron de dos días de convivencia en Toledo, una actividad que se viene desarrollando durante muchos años.  

Este año dimos un vuelco a todo lo que se tenía programado los años anteriores, intentando motivar y animar a los alumnos, para hacer más atractiva la convivencia y la actividad. El día dos, después de ir al albergue donde nos íbamos a hospedar, Albergue de Layos, nos distribuimos por habitaciones, comimos y sobre las 17.00 horas nos dirigimos a Toledo, para hacer un recorrido por los sitios más emblemáticos del mismo. La novedad es que otros años distribuíamos a los alumnos por grupos mezclados por institutos, y ellos durante los dos días realizaban una gimkana que les teníamos preparada. Esta vez, fuimos todos juntos y los profesores los guiamos por los sitios más significativos de Toledo: San Juan de los Reyes, la Sinagoga de Santa María la Blanca, la Sinagoga del Tránsito, la catedral y la plaza mayor, la calle de San Manuel Levi, Plaza Zocodover, la iglesia de Santo Tomé, donde se encuentra el famoso cuadro del Greco El entierro del Conde Orgaz… 

Después de una rápida visita por Toledo, les dimos un poco de tiempo libre para que hicieran unas compras y cenaran, pues sobre las 21.00 horas teníamos que dirigirnos a coger el autobús que nos iba a llevar a realizar un viaje de varios siglos de antigüedad a uno de los parques más bonitos y con mejores espectáculos de toda Europa, el Puy du Fou. En este caso, íbamos a ver el espectáculo estrella del parque, el espectáculo nocturno El sueño de Toledo, un gran espectáculo que tiene una duración aproximada de unos ochenta minutos, donde nos cuentan la historia de España desde el siglo V hasta casi nuestros días, representado por doscientos actores, cerca de dos mil personajes diferentes y todo ello en un escenario de cinco hectáreas. Este espectáculo se remodeló con la Edad de Plata, centrándose en los años veinte, con la llegada del automóvil y los inicios de la aviación.  

Una vez finalizado El sueño de Toledo, nos dirigimos al albergue para pasar “una noche toledana”, en el mejor sentido de la expresión, porque ciento cuarenta chicos, con las hormonas a flor de piel, se encargaron de que la noche fuera “toleda”, pues no pegamos ojo en toda la noche.  

Al día siguiente, levantados (aunque no hacía falta, pues muchos/as ni se habían acostado), desayuno, recogida del albergue y rápidamente subida al autobús pues a las 11 horas teníamos las entradas para visitar, durante todo el día, todos los espectáculos que nos ofrecía el Parque Temático Puy du Fou.  

Hay que señalar que hoy en día Puy du Fou Toledo cuenta con cinco áreas temáticas, que nos trasladan a diferentes épocas del tiempo. La primera, La Zona del Arrabal, que es la entrada al parque y nuestra primera zona de contacto con él. Aquí encontramos las taquillas, puntos de información y varios restaurantes y puestos de comida. Como curiosidad Arrabal significa a los pies de la muralla. Después, viene La Puebla Real, una preciosa villa ambientada en el siglo XVII, a los pies de un castillo. También están Los Alijares, una pradera llena de animales de granja, junto a una espectacular plaza ambientada en el siglo XVI. La Venta de Isidro, una bonita calle del siglo XVIII. El Askar Andalusí, un formidable campamento musulmán del siglo X.  

Iniciamos el recorrido cruzando la monumental Puerta del Sol y nada más entrar nos encontramos con la Puebla Real, un auténtico pueblo del siglo XVII, ahí tuvimos la suerte, de encontrarnos con el Espadero de Vivar, que nos fue relatando cómo ha sido evolucionando la espada, además de la importancia que ha tenido esta en toda España.  

Al pasar La Puebla Real, nos dirigimos al primer espectáculo que íbamos a visitar: Cetrería de Reyes, un espectáculo protagonizado por las aves más impresionantes de la época del Califato; se encuentra en el Askar Andalusí. Allí pudimos ver gran cantidad de aves rapaces sobrevolando los cielos, desde halcones, búhos, águilas, y muchas más, algunas de gran tamaño… Terminó este primer espectáculo con la suelta de decenas que aves que sobrevolaban por encima de nuestras cabezas dejándonos sin palabras. 

Rápidamente, y sin tiempo para digerir la maravilla que habíamos visto, nos dirigimos a ver el segundo espectáculo: El misterio de Sorbaces. La historia de este espectáculo comienza con una boda secreta y prohibida que se celebró en el año 589 entre una joven romana y un príncipe godo en presencia de la Santa Reliquia, que cambiaría el rumbo de la historia, siendo un misterio durante siglos. Por aquellos tiempos intentaban coexistir dos pueblos: los romanos y los visigodos, por lo que las disputas por el poder y a religión eran continuas, ya que ambos bandos siempre querían ganar poder y territorio. Esta historia tiene un final sin tragedia ya que la reliquia hizo el milagro y los cielos se manifestaron trayendo consigo un final feliz.   

El siguiente espectáculo fue el Allende la Mar Océana: un espectáculo inmersivo en el que acompañamos a Cristóbal Colon en la aventura que le llevó a encontrar las américas.  Nos encontramos en el año 1492 y tres barcos están a punto de partir en la búsqueda de una nueva ruta a las Indias; en este viaje nos va a acompañar Cristóbal Colón, a bordo de la Santa María, en un viaje épico y peligroso que culminará, seguramente, en el descubrimiento de América para los europeos. Antes de llegar al nuevo Continente, fuimos pasando por las diferentes instancias y camarotes de nuestro barco, en el que, además, llegamos hasta alta mar y nos adentramos en lo que es una tormenta que se las trajo bien complicada. Todo se mueve como si realmente estuviéramos en plena travesía.  

El siguiente sitio que visitamos fue La venta de San Isidro, que representa una venta manchega típica del siglo XVII, donde encontramos algunos puestos donde comer, algo que siempre ha sido propio de las ventas. En La venta de San Isidro vimos la zona de corrales que es una de las novedades que este año ha inaugurado el Parque. En ella encontramos una diversidad de animales: gallinas, ocas, cabras cerdos y burros.

Después de comer, seguimos con nuestro viaje por Puy du Fou y llegamos a Villa Nueva del Corral, que recrea un pueblo del siglo XVII como referencia a las crónicas del rey Carlos V; allí vimos los mulos, animales típicos de granja, además de ver un gran corral de comedias donde se encontraba nuestro próximo espectáculo, el cuarto que íbamos a ver en el día: A pluma y espada, un escenario que engaña porque apenas tenía dos metros nada más empezar y a medida que avanzaba el espectáculo se convertía en uno de los escenarios más grandes de todo el parque. Ahí vimos la historia de Lope de Vega. En este espectáculo, viajamos hasta Toledo en el Siglo de Oro, donde una nueva obra se va a representar en el corral de comedias, pero este teatro guardaba muchas sorpresas y ahí nada era lo que parecía. En esta obra Lope de Vega tendrá que luchar por el honor de sus amores y por la vida del rey que estaba amenazada por un complot secreto. Termina con un apoteósico final que no os queremos desvelar pero que el espectador no se puede perder porque es uno de los momentos más espectaculares de todo el parque.  

Finalizamos nuestra visita al parque con el quinto y último espectáculo: El último cantar, que se encontraba en el castillo que preside La Puebla Real. Esta representación nos traslada hasta el siglo XI y está centrado en la figura de Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid Campeador. Durante treinta minutos, disfrutamos de una obra que iba cambiando de escenarios y profundizando en las batallas legendarias del Cid.    

Nuestra visita al parque temático Puy du Fou ha sido una experiencia única que os recomendamos al 100%.